Llega un punto en el que todo lo que uno dice es una redundancia, porque en la realidad, en lo cotidiano, en lo popular, en la superficie, hay un claro mensaje que todos sabemos, y no son mas que las frases de Lennon, o de Ghandi, o de tantos otros referentes,y no me gusta repetirlas, no me gusta desearte suerte, ni que se cumplan tus deseos, ni felicidades, ya los sabes, ya esta trillado, es obvio que así lo deseo,no esperes que entre a tu casa ni que te llame por teléfono o te lo diga por fb, no, ya lo sabes. Igual siempre queda algo por decir,nada nuevo, solo es para que no te olvides.Es hasta donde yo llego.
La otra parte la pone la música, es la única que siempre nos va diciendo cosas que nunca nos dijeron antes.Por eso no toco mi piano, porque no tengo nada nuevo para decirte, es mi limite, ni tengo el talento de crear como para que vos me tengas que escuchar, ahí va mi reconocimiento y mi devoción por los buenos músicos,por eso es...
Por eso cuando subo un tema o pongo un cd, me gusta que lo escuches todo completo, porque una canción , un acústico, algo simple, o una bandaza llena de sinfonías siempre ejecutan una composición que por minimalista o sofisticada que sea hay que prestarle mucha atención porque en algún instante te sorprende, desde el principio hasta le final.A la música hay que disfrutarla, prestarle los sentidos, y si te hace llorar o reír,o lo que sea no escatimes en nada que de eso se trata.
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